en proceso


decidiste abrirte de tantas pavadas.
corriste atrás del tren.
nada pudo impedir tus torpezas, y una vez más, como las tantas miles anteriores , tus ojos se cayeron en la tristeza y el dolor.
Viniste con timidez e intrépida.  Me halagó ese acercamiento. Tratarte con la magia y la palabra es un regalo. Tanta vida a punto de aparecer,
ahí, ante mis ojos,
otra vez un milagro en escena,
privada,
lenta,
susurra,
se arrima,
me habla,
yo callo,
se levanta,
su vida,
el ave Fenix es como un viento.
Hasta diez cuento y empieza lo esperada proclama: Por qué nada cambia?,
por qué después de oir las miradas de tantos y tantos,
no nos hablan,
no nos entienden,
siempre tontos,
los libros que te masticaste,
hoy sentís que nada ha cambiado?
Ay almita divina..! me enamora tu ingenuidad...! Pues nada es como vos decís.
has cambiado, has despegado, has reído más que ayer ...
tu consuelo triste ha desaparecido, tu lamento eterno no estropea tu presente... y los augurios de bonanzas ya no te excitan.
estás bien con tu danza, y la noche no es oscura como la otra desolación.
Nunca te vi tan bella... y eso, ya sabés, es encantador...

2 comentarios:

  1. Cuantas veces nos preguntamos porque nada cambia ¿No? Yo a mi analista se lo pregunto muchas veces, pero después me doy cuenta que si cambia, hasta en lo simple de los días. Excelentes palabras, siempre llegan a la subjetividad de uno. Un gran saludo. Sofía.

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